LOS 7 PUEBLOS MÁS BONITOS DE
SALAMANCA
MIGUEL RODERO
BUSQUEDA DE ADELAIDE ABREU-DOS-SANTOS
Viajamos hasta la provincia de
Salamanca, en la Comunidad Autónoma de Castilla y León, para descubrir algunos
de esas pequeñas localidades que, con su encanto, sabrán enamorar a familias,
parejas e, incluso, a quienes se animen a conocerlos en soledad.
El caso es que podríamos haber realizado un repaso de los mejores 10, 15, 20 y hasta 30 pueblos de Salamanca pero, en lugar de ello, nos hemos detenido en unos pocos que consideramos indispensables para que, luego, cualquier visitante añada otros a su hoja de ruta, y por supuesto los comparta con nosotros.
LOS 7 PUEBLOS DE SALAMANCA CON
MÁS ENCANTO PARA MÍ.
1 -
CANDELARIO
Candelario es, indudablemente, uno
de los pueblos que no deben faltar en un ránking de este tipo, comenzando por su
ubicación a la falda de la sierra de Candelario, lo que facilita la aparición
de diferentes paisajes que combinan muy bien con la arquitectura típica de sus
casas de piedra y madera.
A las cientos de viviendas construidas en el siglo XVIII se accede, además, por callejuelas estrechas bordeadas por sus características “regaderas” que delatan la época histórica en la que se desarrolló esta villa, cuando no hacían falta otros caminos dado que todo el mundo se desplaza a pie o a caballo.
IGLESIA PARROQUIAL DE NUESTRA SEÑORA DE LA ASUNCIÓNEn cuanto a sus principales atractivos, tenemos que mencionar la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, símbolo de la zona, como así también la Ermita o el Museo Etnográfico de la Casa Chacinera, donde se recogen toda clase de elementos relacionados con la actividad económica más relevante de la localidad, la chacinería y se ofrecen pases teatralizados que te trasladarán a tiempos pasados.
REGADERAY como no mencionar sus batipuertas… ¿Qué no sabes lo que son? Tienes que visitar Candelario.
BATIPUERTASEste poblado salmantino sobresale
por ofrecer uno de los conjuntos históricos más notables de la zona, una
pequeña urbe medieval que fue
levantada entre los siglos XV y XVI, retocada más tarde con detalles del gótico
y renacentista que permanecen en un excelente estado de conservación.
¿A cuáles tendríamos que acercarnos?
Entre muchos otros puntos, a la Iglesia Santa María la Mayor o la de Santa
Elena, patrimonio de Salamanca y un claro ejemplo de los anteriores estilos.
La
“Ciudad Antigua, Noble y Leal”, como se la denomina hace tiempo, representa uno
de los parajes más estéticos de toda la Comunidad de Castilla y León, con sus
construcciones que no pueden ser obviadas por quienes deseen saber más sobre la
historia local.
Comenzando por el Castillo de Enrique II de Trastámara, tenemos también otros como la Catedral de Santa María o el Palacio de la Marquesa de Cartago, una combinación atrapante que la ubica como una de las joyas de la arquitectura española de los siglos pasados, donde el peso de las fortificaciones era indispensable en la sociedad.
BÉJAR
Béjar, a menos de una hora en coche desde Salamanca y poco más de dos desde Madrid, se
halla la ciudad cervantina rodeado de montañas que elevan aún más la
majestuosidad del paisaje. A los pies de estos gigantes de roca, nosotros podemos
deleitarnos con construcciones como la Villa de El Bosque, un jardín de toques
renacentistas levantado en el siglo XVI; además de la Iglesia de Santa María la
Mayor o el Palacio Ducal.
No menos cautivante resulta la posibilidad de llevar a cabo un recorrido por las antiguas fábricas textiles, las que hace muchas décadas transformaron a esta villa en uno de los primeros polos “industriales” de España. En cada una de ellas subyace un trozo de la España de otra era que la ciudad textil ha sabido reflejar en sus numerosos museos repartidos por esta localidad de mediano tamaño y grandes servicios para el visitante.
Si bien
es cierto que estamos hablando más de una pequeña ciudad -con amplios
servicios- que de un pueblo, es una recomendación que no debéis desoír.
5 - MONTEMAYOR DEL RÍO
Ahora
bien, si creías que todo lo que los pueblos rurales salmantinos podrían
ofrecerte era naturaleza, arquitectura antigua y una gastronomía extraordinaria, deberías considerar un paso por
Montemayor del Río, muy próximo a Béjar. ¿Por qué? Básicamente porque estamos
hablando de un destino medieval enclavado en un lugar digno de cuentos de
caballeros armados.
En cuanto
a los puntos a acercarnos, el más importante es el Castillo de San Vicente, el
cual goza de un magnífico estado de conservación y un restaurante en su
interior, aunque tanto dentro del poblado como en sus alrededores tienes otros
puntos de interés que podrás recorrer en una jornada.
Otro conjunto histórico por el que
debemos pasar al menos una vez en nuestras vidas. Alba de Tormes es famosa por
el puente medieval que cruza por encima del río Tormes, pero asimismo te
aconsejamos ir hasta el Castillo de los Duques de Alba y su Torre del Homenaje,
el Convento de las Madres Carmelitas o la Basílica de Santa Teresa, por mencionar
algunos.
Y vamos a
concluir este listado de 7 pueblos obligatorios de visitar de la Salamanca rural con Mogarraz, probablemente uno de los preferidos
de quienes aman los entornos rupestres, gracias a la hermosura de cada rincón
sobre la Sierra de Francia. Este municipio es un museo al aire libre gracias a
sus 388 caras repartidas por toda la localidad, obra de un artista local
(Florencio Maíllo), que ha conseguido llamar la atención de propios y extraños.
Como
puedes ver, si hay algo que le sobra a Salamanca son los pequeños poblados
perfectos para una escapada de fin de semana o algún día más, y sólo hace falta
salir a la carretera y dejarse llevar tanto por esta guía, como por los propios
consejos de sus habitantes que, al fin y al cabo, son los que mejor conocen los
secretos que guarda esta provincia española.